Desde la exhibición de Kin Kong en 1933, el cine ha sufrido transformaciones abismales relativas a los efectos especiales utilizados para enriquecer un filme. Con grandes aciertos de acuerdo a sus épocas (The Ten Commandments -1956, Star Wars -1977, The Lord of The Rings -2001), pero también con sendas decepciones (Free Willy -1993, Alone in The Dark -2005) y una vasta lista de otras donde ciertos efectos puntuales dejan mucho que decir (como la vaca que sale volando en Twister -1996). Sin embargo, los abusos y privaciones de estos efectos han influido en la calidad final de las películas que vemos.
No obstante lo anterior, todavía sigue siendo la narrativa el aspecto que marca las verdaderas diferencias, o los antes y después, del cine. Y, en ese sentido, de nada sirve haber utilizado tecnologías innovadoras como el sistema de captura de imagen denominado The Volume o el uso de la Reality Camera System o el uso de una Virtual Camera, porque la historia que vemos es tan repetida como probada (ver Pocahontas -1995, Dances With Wolves -1990 ó The Last Samurai -2003, entre otras), aunque sería injusto no darle crédito al buen trabajo que se hizo acá con el guión, pero eso es otra cosa.
Con toda la invasión publicitaria que relativizó la visión acertada de esta película, era fácil creer que estábamos frente a un cambio en la forma de utilizar el cine como medio de expresión. Un cambio tan significativo como lo fue el uso del sonido, introducido por la Warner en 1926 (la primera película con sonido fue "El Cantor de Jazz", de Alan Crosland en 1927) o el uso del color en 1933 por Thecnicolor, pero empleado por primera vez en "La Feria de la Vanidad" (1935), de Rouben Mamoulian. Nada de eso sucederá con estas innovaciones porque al paso que avanzan hoy las tecnologías, más que cambios estamos frente a un borboteo evolutivo del cual ni ahora ni en el futuro cercano, todo el cine se hará parte.
Volvamos entonces a Avatar, a la cual sólo le faltó una historia original porque todo lo demás encaja perfectamente. Tiene un ritmo ágil capaz de concentrar 162 minutos sin entumecerse y una secuencia fotográfica perfecta, pese a ser digital. Con un James Cameron (Titanic -1997) aplicadísimo hasta el más mínimo detalle, aunque desde su obra maestra Aliens (1986) no le hemos visto nada mejor.
No vale la pena mencionar acá las actuaciones porque pasan a ser secundarias, aunque no puedo dejar de advertir a la siempre encantadora Sigourney Weaver (Aliens -1986, Ghost Busters -1984) quien siempre es un aporte en las películas que aparece. Además, lamentar la mala suerte de Giovanni Ribisi (10th & Wolf -2006) cuyo papel en esta cinta (Parker Selfridge, Jefe de Administración de la RDA en Pandora) es totalmente prescindible.
Finalmnte, y evocando el comercial de la Coca Cola, cada persona asume sus propias impresiones de las películas y sé que Avatar es una cinta que marcará a muchos porque es un buen espectáculo. Mi hijo y yo la disfrutamos, la pasamos bien. No hay que dejar de verla, sobre todo en 3D, lo que siempre es atractivo. Y no olviden comprar sus palomitas de maíz.
Título Original: Avatar
Título en Español: Avatar
País: Estados Unidos, Reino Unido
Director: James Cameron
Guión: James Cameron
Reparto: Sam Worthington, Zoe Saldana, Sigourney Weaver, Stephen Lang, Joel Moore, Giovanni Ribisi, Michelle Rodriguez, Laz Alonso.
Año: 2009